Equivale a zamuro. Son dominicanismos de pura cepa cibaeña. Se les atribuye a gentes de temperamento callado y sonso. "Apendejaos", como dicen. De todo se azoran y piensan tonterias y por nada del mundo las dicen.
Apocados, Vergonzosos, bien espantados, como gallina tuerta, cuando por desgracia tienen que estar entre la gente.
El guanajo es acampesinado, anticuòn. Dà lo que no tiene por no tener que intercambiar con los demas. Es que no se atreve hablarle a nadie y prefiere quedarse como "alelao" oyendo a los otros conversar.
Todo marcha sobre ruedas mientras no se les interpele por su opinion o su punto de vista; entonces la hecatombe en su aguanajada paz interior.
Pero el guanano no es asì con todos. Su aparente idiotez, queda dicho, es con las personas extrañas. Las caras nuevas. No con los de su confianza por lo regular tan guanajos o màs guanajos que èl.
Entonces rien grotescamente de cosas estùpidas y sin gracia. Hacen bromas carentes por completo de finura. La cortedad de que adolecen les impide ver medio milimetro màs allà de las puntas de sus narices. Visten mal y se comportan con torpeza. El trote de un elefante o de un dinosaurio resulta màs elegante y sutil que el paso aplatanado de un guanajo subiendo unas escaleras o entrando a un despacho.
Con toda y su insìpida manera de ser y comportarse, no puede decirse que el guanajo sea un tipo malo, y mucho menos chismoso, sicatero o comparòn. Nunca.
Esas son actitudes que serian demasiado complicadas para ellos que bordean por su guanajez, casi los linderos de la oligofrenia. Pero ¡cuidado! No confundamos el guanajo con el mongòlico. Este ùltimo es el resultante de serios, profundos e insalvables trastornos genèticos: el guanajo no tiene nada de eso. Es asì por ambiente. Por temperamento y educaciòn. Como nunca opina es difìcil llegar a sus entresijos mentales. Como nunca tiene una iniciativa, se nos hace cuesta arriba conocer de sus aspiraciones, Si las tiene....Como quien no quiere la cosa sèpase que la guanajerìa se corrige con el tiempo y un palito. ¿Cuàl es el palito? El no ser guanajo por esencia, de por sì, sino por existencia, o sea producto del cambio de ambiente.
Sale de su pareja, monte adentro y llega a la capital por vez primera, y claro, un guanajazo de tomo y lomo. Pero si es inteligente, la inteligencia no està del todo ausente en estos congèneres, y siente que es aceptado y hace las cosas bien y se le alaba por ello, va poco a poco cogiendo el piè. Se forma a su alrededor una atmòsfera de confianza y el dìa menos pensado abur a la guanajerìa. Es otro.
Antes habìan màs guanajos que ahora, pero todavìa quedan algunos que otro rezagado y hay que dejarlos asì. No se tome el trabajo de aconsejarles. La fauna humana, para que sea tal, necesita de todos los especìmenes por igual.
¡Ay del mundo si no hubieran guanajos...Seguro que ya se estuvieran fabricando en "los paìses"...Son parte del folklor del universo...