06 enero, 2008

LA AVARICIA...COMO TEMA EN LA NOVELÌSTICAS DE IVO ANDRIC......


..."La avaricia con su consecuente persecuciòn y posesiòn desenfrenada de los bienes terrenos vuelven al hombre inquieto, egoista, duro y frio"...
(Mounier)
De la avaricia se han dicho muchas cosas. Ha sido clasificada como un vicio, un vicio malèvolo, gèlido y demonìaco, de acaparar y acaparar, de retener sin reposo ni respiro dinero y bienes, haciendo caso omiso de las perentorias y urgentes necesidades que crucifican al hombre y lo obligan a gastar.

Se ha dicho tambièn que la avaricia es una obsesiòn, una idea fija, una locura de riqueza, no la riqueza y el dinero que dan prestigio, disfrute o poder, sino para simple y llanamente tenerlo ahì, amasado debajo del colchòn, sin que produzca y genere bienes y servicios, sin que llene su cometido social, sin que florezca.

"LA SEÑORITA" es el tìtulo de esta obra, es la novela que nos lleva a las consideraciones anteriores, cuyo autor Ivo Andric fue relativamente poco conocido hasta que en el 1961 le fuera otorgado el Premido Nobel de Literatura, naciò en Yugoeslavia en el año 1892 y falleciò en el 1975, su fama ha trascendido grandemente porque su narrativa y segùn podràn comprobarlo todos los que hayan leìdo o lean en esta su obra, toca las llagas espirituales de los hombres y las mujeres de nuestro tiempo, llagas y dolencias de espìritu, que se sabe, no tienen fronteras ideològicas, ni mìsticas que las erradiquen del todo.

Del libro leemos..."toda persona que no sabe como regular la relaciòn entre sus ingresos y gastos que la vida exige de ella, està de antemano condenado al hundimiento. Tus ingresos no dependen exclusivamente de ti, sin embargo, tu ahorro depende exclusivamente de ti. A eso debe enderezar toda tu atenciòn y toda tu fuerza".

Esta no es màs que la historia de la Señorita Rajka Radokavic, cuyo padre antes de morir y cuando ella apenas contaba con 15 años de edad, le dice: "mira pequeña, tu y yo tenemos que hablar..." y de ahì en adelante tranquilo y solemne comenzò a decirle cosas extrañas con palabras desacostumbradas, un monòlogo de profundo dolor que solamente se explaya cercana la muerte, donde le mostraba a la pequeña sus pareceres sobre los secretos del ser humano en la sociedad.

"...Trabaja tanto como puedas y quieras, pero ahorra, ahorra siempre, antes de todo y en todo, no te preocupes por nada ni de nadie. Porque nuestra vida està hecha de tal modo, que los hombre no reciben nada ni prosperan por el trabajo, sino por el ahorro".

Es fàcil advertir como asimilò esa tierna mente infantil todas aquellas sentencias que le queria inculcar su padre antes de morir para que ella fuera su continuaciòn, para que ella atesorara riquezas, trabajara mucho, guardara mucho tambièn, y gastara poco, todos los consejos de su padre los guardò en su tierna almita, y como se verà en el transcurso de la obra hizo de esta mujer sin edad, movida por extrañas y atàvicas creencias, un ser que viviò hermèticamente recluido en su mundo interior de asfixiante lucidez, despuès de haber renunciado, consciente y voluntariamente, al placer de la vida, se retrotae en un cìrculo vicioso, al que no habrà de salir jamàs, donde su padre antes de morir le abriò el entendimiento a lo que segùn èl creìa era la mejor manera de vivir, trabajar y ahorrar.

..."Tienes que ser implacable contra ti misma y contra los demas. Porque no basta achicarte en tus deseos y necesidades; esa es la parte màs insignificante del ahorro, antes bien, se debe en primer lugar y para siempre matar en uno mismo todas esas llamadas consideraciones màs altas, las nobles costumbres de la excelencia interior, de la generosidad y la compasiòn...."

Esto le trajo como consecuencia un distanciamiento con sus familiares. Como, poco a poco al dedicarse a la usura, va creciendo en ella, en su interior ese tentàculo de su afàn por el dinero, que la hace perder el màs mínimo sentimiento de amor y calidez humana.

"LA SEÑORITA", cuyo tìtulo original es "GOSPODJICA", nos trae la vuelta al pasado de Rajka Radojavic e inicia su historia, la infancia de Rajka, que sentìa un profundo y filial afecto por su padre y la vida que lleva con su madre anciana y enferma.

"Debes saber que los hombres son buenos y concienzudos con aquellos que no dependen de ellos y que nada les piden, pero tan pronto como te ligas a cualquiera y te colocas bajo su dependencia, termina todo"...

Se da el caso con este escritor que grandes intelectuales y crìticos se asombran de que haya salido del anonimato en el que precisamente se encontraba gracias al otorgamiento del premio Nobel que se le otorgò en el 1961, hoy en dìa sus obras son traducidas a todos los idiomas, multiplicàndose las ventas de las mismas, sus obras son..."una obra maestra, una visiòn del mundo, una explicaciòn de la existencia, una meditaciòn sobre la eternidad, sus personajes responden a los problemas de la època, perfectamente humanos movidos por pasiones humanas, en su interior late una vigorosa vitalidad que hace emotivo, apasionante y real lo que sòlo es prodigiosa invenciòn creadora"...

La avaricia y la usura que van de la mano y es tema principal de esta novela que nos ocupa, nos expone ampliamente como el ser humano se despersonaliza, se vuelve duro, implacable, donde el amor, las cosas bellas y tiernas de la vida no tienen cabida en su corazòn endurecido por el afàn despiadado de hacer dinero, no para satisfacer las necesidades de la vida sino para acumularlo sin ningùn objetivo, esto los obnubila y los convierte en seres sin almas y sin sentimientos, Ivo Andric tiene la facultad de adueñarse completamente de la voluntad del lector en esta su novela....y lo consigue...



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